Le mostraremos cómo aprovechar al máximo el aceite de oliva preparando una variedad de sabrosas salsas que se consideran saludables.
Última actualización: 20 de marzo de 2022
Existen diferentes salsas que se pueden preparar con aceite de oliva para acompañar y potenciar las cualidades organolépticas de los platos. Este ingrediente es muy saludable cuando se consume en dosis razonables. Consigue aportar una importante cantidad de ácidos grasos esenciales.
Antes de comenzar, es importante poner especial énfasis en el uso de aceites de calidad en su dieta. La industria suele incluir productos de semillas endurecidas o refinadas en sus alimentos. Estos se encuentran en los lípidos que podrían aumentar el nivel de inflamación.
Por eso te mostramos qué salsas puedes preparar mejor con aceite de oliva para aportar variedad a la carta. Recuerde incluirlos en el contexto de un patrón variado y equilibrado..
1. Guacamole
El guacamole es una salsa de origen mexicano Combina el aceite de oliva virgen extra con el aguacate. Gracias a estos ingredientes, el organismo se abastece de una buena cantidad de omega-3.
Estos lípidos son capaces de controlar los mecanismos inflamatorios en el medio interno, lo que reduce el riesgo cardiovascular. Esto se evidencia por un Estudio publicado en International Journal of Molecular Sciences.
Para obtener los mejores resultados Es necesario incluir jalapeños y un poco de cebolla morada en la receta. También un chorrito de jugo de limón y una pizca de sal.
2. Alioli
El alioli es una de las salsas más típicas de la cocina mediterránea. En este caso, la base es el huevo junto con el aceite de oliva.
Tiene un alto contenido de ácidos grasos pero tiene un toque de ajo que la diferencia de la mayonesa tradicional. Gracias a este elemento se aportan fitoquímicos que tienen probado ser crucial para reducir el riesgo de enfermedad.
El alioli se puede combinar tanto con carnes como con pescados. Incluso va bien con verduras como los tubérculos. Ahora necesitamos golpear la cantidad correcta de ajo.
3. pesto
La salsa pesto proviene originalmente del territorio de Italia. Se prepara con aceite de oliva, albahaca, ajo, piñones y algunos quesos como el parmesano o el pecorino.
Es una preparación que combina muy bien con la pasta, aunque también se puede incorporar a la pizza. Es fácil de preparar y tiene un sabor distintivo.