¡Adiós a la calvicie! Descubre el secreto de la cebolla morada

La cebolla es un alimento que ha sido utilizado desde la antigüedad por sus múltiples propiedades y beneficios para la salud. En este artículo, exploraremos los diferentes aspectos de la cebolla y cómo puede ser incorporada en la dieta diaria.

Origen y popularidad de la cebolla

La cebolla tiene su origen en Asia y ha sido cultivada desde hace miles de años. Fue considerada un talismán por los egipcios, quienes creían que tenía el poder de aliviar numerosas enfermedades. También fue apreciada por los griegos y romanos, y el célebre médico Hipócrates la recomendaba como diurético y para tratar heridas y neumonía.

En la medicina tradicional china, la cebolla ha sido recomendada especialmente en enfermedades respiratorias. Su uso se extendió durante la Edad Media y en la actualidad, es la tercera hortaliza más cultivada en el mundo, después del tomate y la patata.

Propiedades nutricionales de la cebolla

La cebolla está compuesta principalmente por agua, lo que la convierte en un alimento ligero con pocas calorías. Es rica en carbohidratos, seguidos de la fibra, y proporciona pequeñas cantidades de proteínas y grasas. En cuanto a vitaminas y minerales, la cebolla es una buena fuente de vitamina C, potasio, calcio y fósforo.

También contiene cantidades significativas de fitoquímicos, como los flavonoides y quercetina, que tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Estos compuestos pueden ayudar a reducir los síntomas de la fatiga, ansiedad y depresión, además de tener efectos protectores frente al cáncer, especialmente de mama, colon y próstata.

Además, la cebolla contiene compuestos sulfurados con efectos depurativos y aceite esencial con propiedades bactericidas y fungicidas.