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Misterio revelado: lo inimaginable hallado por arqueólogos

Los arqueólogos siempre están tropezando con piezas intrigantes
Claro que sí, es la naturaleza misma de su trabajo, pero a veces tropiezan con cosas tan peculiares, extrañas y desconcertantes que ni siquiera ellos las vieron venir. Te quedarás de piedra cuando veas lo que desenterraron últimamente. Estos son los 20 hallazgos arqueológicos más misteriosos.
Número 20: antiguos retretes con barriles
Uno de los hallazgos más inesperados de la arqueología en Dinamarca fueron unos antiguos retretes construidos con barriles. Aunque puede que no sea el hallazgo más glamoroso, entusiasmó a los expertos. No solo encontraron retretes, sino también excrementos humanos que describieron como «en perfecto estado». Los barriles utilizados para transportar mercancías y almacenar pescado se convirtieron en retretes improvisados. Los bariles estaban atados y forrados de arcilla, y tenían tubos en el fondo para el desagüe. Este hallazgo nos revela información fascinante sobre la vida cotidiana en la época medieval.
El curioso descubrimiento de las ruinas peculiares
En las profundidades de una selva amazónica se descubrieron unas ruinas misteriosas que parecen ser el signo de una antigua civilización. Las obras de arte recogidas en el lugar han dejado perplejos a los expertos. Se cree que estas ruinas son el vestigio de una civilización antigua que vivió en estas tierras hace muchos siglos. Este hallazgo nos muestra que la selva amazónica está llena de secretos y misterios por descubrir.
Número 19: canibalismo en Europa
Cuando pensamos en el canibalismo, normalmente tendemos a asociarlo con lugares exóticos y oscuros aislados del resto del mundo. Sin embargo, el canibalismo también existió en Europa. Los paleontólogos han descubierto huesos de 100,000 años de antigüedad en una cueva en Francia que muestran evidencias de que fueron consumidos por otros neandertales. Incluso durante las hambrunas del siglo XI en Inglaterra, se vendía carne humana cocinada en los mercados. Estos hallazgos nos muestran un lado oscuro de la historia de Europa que quizás preferiríamos olvidar.
Número 18: el esqueleto de Atacama
En el desierto de Atacama, Chile, se descubrió un esqueleto momificado con una apariencia alienígena. Sin embargo, un estudio reciente reveló que el esqueleto pertenece a una niña humana con un desarrollo óseo anormal causado por mutaciones genéticas. Este descubrimiento pone fin a las especulaciones sobre los orígenes extraterrestres del esqueleto y abre la puerta a posibles tratamientos para personas con problemas óseos.
Número 17: antiguas momias de fuego y Baloy
En la ciudad de Cawayan, Filipinas, se encontraron momias antiguas conocidas como las momias de fuego y Baloy. Estas momias fueron preservadas a través de un largo proceso de deshidratación y ahumado realizado por la tribu local de Baloy. Aunque con la llegada de los españoles a la región, se abandonaron estas prácticas, las momias de fuego permanecieron ocultas y protegidas en cuevas hasta su reciente descubrimiento. Estas momias se han convertido en los protectores de la tribu y de sus lugares sagrados.
Número 16: monedas de oro en una antigua tumba
En el cementerio real de la ciudad de Shianji, China, se descubrió el mayor alijo de monedas antiguas chinas hasta la fecha. Este tesoro de 285 monedas de oro antiguas se encontraba en un cementerio de la dinastía Han y se cree que fue concedido por el emperador al marqués. Además de las monedas, se encontraron objetos de bronce, oro y jade, lo que hace de este hallazgo uno de los más notables en la historia de la arqueología china.
Número 15: materia fecal vikinga
Uno de los hallazgos más inusuales en la arqueología es la mayor muestra de heces humanas de la que se tiene constancia. Descubierta en el Reino Unido, esta muestra de materia fecal es de un hombre vikingo y proporciona información fascinante sobre la dieta de los vikingos. Se encontraron huevos parasitarios en la muestra, lo que sugiere que el hombre vikingo sufría de lombrices intestinales. Este hallazgo nos muestra una cara menos glamorosa, pero igualmente interesante, de la vida de los vikingos.
