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Mala circulación:

La Mala circulación es una condición bastante común en nuestra
población aunque muchas veces pensamos que solo está asociada a
un grupo de personas o que tiene una estrecha relación veremos que
no es así, puesto que esta condición puede afectar a cualquiera de
nosotros.

Debemos saber que la mala circulación es la dificultad que tiene la
sangre de hacer su recorrido por los diferentes vasos sanguíneos y así
poder llevar los nutrientes necesarios a las diferentes partes del
cuerpo para su funcionamiento óptimo, los cuales debemos tratar de
corregir para evitar futuras complicaciones con otras patologías.

Razones de la mala circulación:

Puede ocurrir por diferentes razones, siendo entre las más comunes:
un elevado consumo de grasas saturadas, poco consumo de fibras,
poco consumo de líquidos, y alimentos elevados en sal, esta situación
hace que se eleve el colesterol en nuestro cuerpo y que nuestros
vasos sanguíneos pierden su elasticidad.

Aunque también en nuestro cuerpo se evidencia diferentes síntomas
que hacen que podamos sospechar que sufrimos de mala circulación y
estos pueden ser: Pies hinchados, fríos, y sensación de hormigueo, el
sedimentarismo y el estrés y factores hereditarios.

En esta condición existen diferentes grados de gravedad que van en la
siguiente escala (leve, moderado, de riesgo, preocupante, severo,
patológico, crónico) es por ello que haremos mención a los mas
comunes:
1: Arañas vasculares: (leve).
2: Varices y piernas muy hinchadas (moderado)
3: Sensación de hormigueo y calambre (riesgo)

4: Engrosamiento y cambios de color de las uñas de los pies
(preocupante)
5: Alteraciones en el color de la piel (preocupante)
6: Agotamiento y falta de rapidez en los movimientos (preocupante)
7: Cambio de temperatura (preocupante)
8: Piel muy seca, dura, y acartonada (preocupante)
9: Cicatrización lenta de heridas (severa)
10: Claudicación intermitente (severa)

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Con esto usted puede tener una idea, si presenta en algunos de estos
síntomas en qué nivel de la aflicción se encuentra y así acudir a su
médico de confianza.

Existen diferentes métodos para mejorar la mala circulación siendo
uno de los más importantes cuidar de nuestra alimentación y realizar
ejercicio físico siendo una de las partes más afectada de nuestro
cuerpo piernas y manos.

Les presentamos 10 consejos fáciles de aplicar para evitar la mala
circulación:

1: Evitar estar en la misma posición mucho tiempo
2: Medias compresoras
3: Colocar las piernas en alto
4: Usar calzado cómodo
5: Practicar deporte frecuentemente
6: Dieta sana y equilibrada
7: Hidratarte por dentro y por fuera
8: Masajear tus pies

9: Evitar fuentes directas de calor
10: Visitar al podólogo.

En definitiva si observas o padeces de algunas de estos síntomas tu o
algún familiar es bueno ir al médico, muchas veces esta condición está
asociada a enfermedades como: la diabetes, insuficiencias renales ,
cardiacas o estar relacionadas con procesos crónicos, lo importante es
estar en chequeo médico a tiempo, ya que según el grado de la lesión
se elegirá el tratamiento adecuado